La economía circular es fundamental para garantizar la sostenibilidad del planeta. En este artículo te explicamos a fondo qué es este concepto y cómo está presente en las empresas en las que invertimos.
La economía circular es una buena solución para reducir la extracción de materias primas a corto plazo y combatir el cambio climático, al proporcionar un modelo económico pensando para preservar la naturaleza reduciendo los gases contaminantes.
Para que te hagas una idea de la dimensión del problema. Nueve millones de personas fallecen anualmente como consecuencia de patologías relacionadas con la contaminación, a finales de este siglo, la temperatura del planeta subirá tres grados, y más de un millón de especies está en peligro de extinción. Es la triple amenaza que advierte Naciones Unidas por el cambio climático que también ofrece datos del efecto de combatir las negativas consecuencias de la emisión de dióxido de carbono (CO2) con la economía circular. De este modo, si modificamos la forma en que fabricamos y empleamos el plástico o materias primas como el aluminio, cemento y acero se podrían disminuir los gases contaminantes en estas industrias hasta un 40% para 2050.
Qué es la economía circular
Esta clase de economía cambia por completo el paradigma que tenemos actualmente. El capitalismo basa su modelo de crecimiento en producir en masa todo tipo de bienes que son desechados tan pronto como se usan o no son útiles. Es una práctica poco sostenible, puesto que el planeta no es capaz de soportar ese nivel de producción. Cuanto más crece el número de personas, más difícil se hace sostener este sistema.
Por tanto, lo que se promueve con esta práctica es el reciclaje, darle una segunda vida a los artículos y materias primas. En definitiva, alargar la vida útil de los productos, ya sea a través de donaciones, ventas o nuevas utilidades.
Principios de la economía circular
Se basa principalmente en 4 puntos, todos ellos fundamentales para que este sistema económico tenga sentido:
Reducir
Se trata de limitar las necesidades de materias primas para que el impacto en el planeta sea mayor.
Reutilizar
Todo lo que se pueda volver a usar tiene que aprovecharse. Por ejemplo, tirar electrodomésticos que todavía funcionan no es una opción sostenible.
Reparar
Si algo se estropea, es mucho mejor arreglarlo que gastar recursos para volver a fabricarlo desde cero.
Reciclar
Cuando ya no quede más remedio que desechar algo, reutilizar sus materiales para crear nuevos bienes genera valor para la economía y evita emisiones innecesarias de gases a la atmósfera.
Ventajas de la economía circular
Es evidente, por lo que te hemos mencionado en líneas anteriores, que el mayor beneficio es conseguir un planeta más sostenible. No obstante, hay muchos más puntos positivos.
- Las mejoras en la economía y en los procesos productivos permitirán que, poco a poco, los países cuenten con un mayor Producto Interior Bruto.
- La reutilización de los recursos es más rentable que tener que fabricarlos de nuevo.
Al reducir costes de fabricación, las empresas son más competitivas y pueden abaratar precios. - Abre la puerta a nuevas oportunidades de negocio basadas en la segunda mano, en la reparación de diferentes productos y en el reciclaje.
- Creación de puestos de trabajo.
- En materia de salud, se disminuirán los problemas respiratorios asociados a la contaminación.
En Santalucía Asset Management aplicamos criterios ESG, por sus siglas en inglés, o ASG, en español (Medioambiente, Sociedad y Gobernanza) a la hora de seleccionar empresas para incorporar en nuestras carteras de fondos de inversión. En este sentido, ejemplos de compañías que aplican la economía circular en su sistema productivo son los fabricantes de envases de vidrio, el francés Verallia, o el español, Vidrala, o la compañía española especializada en el reciclaje de residuos, Befesa.
Entra en Escuela de Inversión y mantente informado de todas las novedades en materia de sostenibilidad. Puedes también suscribirte a nuestra newsletter.